A la hora de viajar, algo tiene ir varias veces de restaurantes, que hay ocasiones que nos gusta disfrutar de ideas más informales, donde especialmente las cenas, nos gusta (cuando las circunstancias lo permiten) hacer cenas informales en plan picoteo con cosas que podemos comprar en plan picnic en merenderos dónde disfrutar de una buena puesta de sol.
Alternativas en torno al viaje
Queremos compartir con vosotros algunas reflexiones sobre cómo nos gusta viajar y algunos merenderos dónde disfrutar del ocaso del día; Y ya de paso, ver si opináis como nosotros. A la hora de viajar, más si vamos a estar varios días y hay que hacer noche, en muchas ocasiones, alguna cena la preparamos nosotros con productos adquiridos durante el viaje.
Esto es muy habitual en viajes veraniegos, cuando hace buen tiempo, y podemos cenar en algún merendero con los niños, o en una casa rural.
Evidentemente, estamos hablando de cosas ligeras, pues nuestras vacaciones suelen ser con muchos viajes documentándonos para publicar experiencias. Por esta razón, solemos ir a cosas bastante simples, pero como buenos foodies, tratamos de no renunciar al sabor; como por ejemplo con una paleta ibérica 100% de bellota.
Algunos merenderos donde disfrutar de una buena puesta de sol
Mismamente, durante este atípico verano, en que no hemos querido realizar grandes viajes, si no cosas cortas en entornos tranquilos, rurales y alejados de las grandes aglomeraciones, hemos realizado varias cortas escapadas por Castilla y León, donde en ocasiones hemos disfrutado de estos merenderos donde disfrutar de una buena puesta de sol.
Recorriendo los Ancares leoneses
Posiblemente este merendero sea el merendero mejor acondicionado que hayamos visto nunca. Entre Langre y San Miguel de Langre, en El Bierzo, disfrutamos de unas instalaciones magníficas que reunían parrilla, horno de asar de leña, mesas de piedra y unos columpios chulísimos.
De hecho fue un lugar excelente para disfrutar de varias veces de cenas, casi a la luz de las estrellas, aunque la propia instalación contaba con luz.
Aunque es una práctica habitual en nuestros viajes, casi nunca lo preparamos con mucho tiempo, y tenemos que pensar ideas para cenas con productos ibéricos, rápido, sabroso y muy socorrido. Así que en este caso, la primera noche por ejemplo preparamos unas pulguitas de jamón ibérico gourmet, como las que nos enseñaron a preparar los amigos de La mesa del Conde.
Estando en El Bierzo, por supuesto que acompañamos con un vino tinto mencia, en este caso un tinto roble de Prada a Tope.
Mirando al yacimiento de Siega verde
Otro viaje del pasado verano fue por Salamanca, donde recorrimos una pequeña parte próxima a las Arribes del Duero. Allí el río Águeda ha preservado un lugar donde se encuentra este yacimiento arqueológico de Siega Verde. Una zona con multitud de grabados rupestres de época paleolítica.
Este viaje se lo recomendamos a todos, pues sin duda es un espectáculo de arte rupestre que se ha conservado desde hace más de 20.000 años a lo largo de más de 500 paneles grabados, si bien no se ha explorado todas las piedras donde posiblemente se pudieran encontrar más.
Una de las mejores visitas son las nocturnas o al ocaso, pero como para cenar os tenéis que ir a Villar de la Yegua, a San Felices de los Gallegos o a Ahigal de los Aceiteros (por cierto en este último se come muy bien), otra opción es improvisar algo en el merendero del mirador del yacimiento.
Este mirador dispone de una vista privilegiada, aunque no está tan bien acondicionado como el anterior. No obstante resulta cómodo y tranquilo, pues no tiene pinta de estar muy transitado. Además de que los atardeceres regalan unas vistas maravillosas. Ojo, para llegar a este lugar hay que entrar por un camino agrícola.
La casa de la Madera de Burgos
Nuevamente por Castilla y León, recorrimos la Sierra de la Demanda en búsqueda de los dinosaurios, y sus huellas. Al igual que en Cuenca o en La Rioja, en Burgos hay una importante concentración de yacimientos de icnitas. Además de que se han descrito en la zona dos especies totalmente nuevas y se está en fase de análisis de otras dos.
Pues en este entorno tan especial, además del famoso pino-roble, un curiosísimo ejemplar de dos árboles en perfecta simbiosis, hay una pradera donde se encuentra el Santuario de Nuestra Señora de Renvenga. Allí se encuentra esta Casa del Parque, con un diseño muy especial hecho de troncos de madera. Y un poco más adelante está la necrópolis visigoda de Revenga.
Es en este lugar donde además de un divertido parque infantil, se encuentran varias sillas y mesas a la sombra donde improvisar un picnic en medio de la naturaleza. Tanto, que hasta caballos pastan junto a ti. Eso sí tienes que llevar la comida desde Quintanar de la Sierra.
La Santa Espina
Seguimos recorriendo Castilla y León, y en esta ocasión lo hacemos visitando el monasterio cisterciense de la Santa Espina, en Castromonte; un bellísimo paraje de Valladolid en los Montes Torozos. Este lugar, hoy dedicado a Escuela de Capacitación Agraria, un instituto de formación agropecuaria e industrias agroalimentarias, sigue manteniendo gran parte de su encanto.
Desde ahí surgen varias rutas simples de senderismo, algunas atraviesan una preciosa pradera junto a un todavía pequeño río Bajoz, un importante río que desemboca en Toro.
Igualmente, muy cerca de estas instalaciones se encuentra otro lugar muy interesante; Urueña. Allí, junto a la Ermita de la Anunciada, se encuentra un merendero que imaginamos que se usará durante las romerías de esta población vallisoletana a esta ermita, pero que podéis disfrutar libremente.
Este sitio es magnífico como complemento a una visita a este magnífico pueblo, que se encuentra catalogado entre los Pueblos más Bonitos de España y que además, es una de las Villas del Libro.
Hoces del río Duratón
Y la última escapada de este año ha sido por Sepúlveda, donde pasamos el día recorriendo parte del Parque de las Hoces del Río Duratón. Allí hay varias rutas interesantes. Una muy atractiva e ideal para hacer en familia es la Senda de los dos Ríos, en su variante corta de unos 5 kilómetros. Por allí se pasa junto al puente romano de Talcano, del que hoy solo queda un arco de medio punto.
Pero en su versión larga, de más de 12 kilómetros se pasa junto a la Cueva de los 7 altares, una ermita rupestre que para su protección hoy se encuentra cerrada con una verja.
Pero el camino permite llegar junto al quiosco de Jacinto, un chiringuito junto al río Duratón que ofrece bebidas y cosas de picoteo, aunque como tienen una cocina pequeña, tan solo ofrecen bocadillos o hamburguesas. El lugar es privilegiado y da gusto descansar después de una larga caminata por este Parque Natural de las Hoces del Río Duratón.
Y ya veis, que se puede salir incluso en este tiempo tan extraño, siempre que mantengamos las medidas sanitarias adecuadas. El turismo es uno de los motores de nuestra economía y una forma de vivir experiencias únicas. Y es que no todo es sol y playa; y además de restaurantes, también se puede disfrutar de entornos rurales haciendo picnics.
Y a vosotros, ¿qué lugares os gusta visitar? ¿Os gusta ir de picnics como alternativa a lugares más convencionales? Dejadnos un comentario con otros merenderos donde disfrutar de una buena puesta de sol. Seguro que son muy interesantes.
Muy chula esta lista de merenderos, sin duda el más interesante para mi gusto es el Mirador del Yacimiento de Siega Verde en Salamanca. Eso sí, hemos echado de menos algún merendero de Almería en esta lista.
Es que no conocemos bien esa zona, pero seguro que los hay chulísimos