Recientemente hemos vuelto a pasar, y bien dicho a pasar, porque no era el destino, aunque nos pillaba de paso, por La Rioja. Pasamos varios días recorriendo Navarra, donde descubrimos cosas chulísimas, y por lo que sabemos que tenemos que regresar. Pero de vuelta, buscando las huellas de dinosaurios de La Rioja, una ruta de las ignitas riojanas, nos detuvimos en Cornago, un pintoresco pueblo riojano que se asienta sobre un cerro.
Allí además de dinosaurios, encontramos muchas cosas; incluso cosas que no esperábamos. Cosas que vamos a tratar de darte a conocer.
Información útil para visitar la zona
Cómo llegar
Si nos centramos en Cornago, como punto medio de esta zona, os diremos que no es sencillo llegar, pese a que no tiene malas carreteras. Siguiendo la carretera regional LR 283 puedes llegar hasta la base de este cerro.
Abrir nuestra ruta de las ignitas dela Rioja en una ventana independiente
Esta misma carretera te lleva hasta Igea, donde se encuentra el Museo Paleontológico de la zona. También por una desviación de esta, la carretera LR 286 se llega a Enciso, donde se encuentran más yacimientos de ignitas, un parque de multiaventura y una ruta de senderismo que conecta maquetas, yacimientos y vistas.
Dónde Comer
Seguro que hay muchos lugares chulos en la zona, pero nosotros sin pretenderlo dimos con uno que nos dejó sorprendidos por la calidad, cantidad, presentación,.. En Cornago, bajo la plaza mayor, se encuentra en una calle estrecha (como todas las de la población), la Taberna de la Reyes. Puede sonar a que te dan de comer –“lo que haya”- pero ¡qué gran sorpresa! Magnífico lugar; totalmente recomendable. Pero el coche, dejadlo abajo.
Dónde alojarte
Reconocemos que este viaje no nos alojamos en la zona, pero viendo la zona, no hay mucho donde elegir. Si tuviéramos que recomendar un lugar, te diríamos que en Enciso, nos gusta mucho la Casa Abaceria. Y en Igea, nos decantaríamos por Hostal Peñacárdena.
Historia de la zona
Esta zona, colindante a las tierras altas de Soria, el otro lado de la montaña, comparte con ella que hace 70 millones de años era una zona pantanosa, y quizás una marisma, donde habitaban dinosaurios. Fruto de estos habitantes, nos llegan al igual que en Soria, su huellas fosilizadas, lo que hace que podamos hablar de Rutas de las Icnitas de Soria y Ruta de las Icnitas de La Rioja. Aunque también se da en Guadalajara y Teruel (especialmente esta última de alta relevancia).
Esta zona fue reconquistada casi definitivamente en época de Fernán González, el primer Conde independiente Castellano. Durante 3 siglos Cornago fue frontera con las taifas de Tudela y Zaragoza, pero no sufrió ataques, ya que esta zona es bastante inhóspita y las razias se hacían por caminos más sencillos por el norte. Una vez reconquistada la zona por cristianos, de nuevo fue frontera, pero ahora de los reinos navarros y aragonés, con Castilla. Por esta razón el castillo alto medieval fue reconstruido totalmente entre los siglos XIII y XIV. Y es la fortificación que se puede ver hoy.
Qué ver en la zona de Cornago
Nos vamos a centrar en Cornago, por ser el pueblo donde más cosas vimos. Después os contaremos otros lugares haciendo una ruta. Seguro que no le dedicamos tiempo suficiente, y por eso regresaremos. Lo tenemos en la agenda. Pero en ese viaje sobre todo queremos visitar más yacimientos de icnitas, el Museo Paleontológico de Igea y el Parque de los dinosaurios de El Barranco Perdido, del que solo vimos algo.
Cornago
Cornago está en una zona dura, donde lo que mejor arraiga sean las vides, por lo que es una zona productora de vinos de la DOCa. Rioja. Es un pueblo pintoresco, casi colgado sobre una colina en medio de un valle. Desde lejos destaca en lo alto del cerro el castillo y una iglesia. Luego la carretera te baja hasta la base de la colina y toca decidir qué hacer con el coche.
Nosotros subimos casi hasta arriba con el coche. NO LO HAGAIS, en la parte alta las calles se vuelven cada vez más estrechas y hasta es posible no dar la vuelta. Mejor dejad el coche abajo y subid paseando por estrechas callejuelas.
Por lo que nos contaron, generalmente en este pueblo viven unas 300-400 personas, pero en verano se llena. Sobre todo en fiestas. Más allá de la arquitectura tradicional, que es bonita de ver y que en este pueblo se ha respetado bastante. Lo más interesante es el castillo (transformado en cementerio), la iglesias y ermitas.
Castillo de Cornago
Situado coronando el cerro sobre el que se asienta esta población, fue parte del mayorazgo de Don Álvaro de Luna, Maestre de Santiago y valido de Juan II de Castilla. Este castillo, como os hemos contado, fue edificado sobre uno previo para controlar la frontera de Castilla con Aragón. Con la unión de las coronas, esta frontera interna dejo de tener la misma importancia.
Si a lo anterior le añadimos lo incomodo de vivir en un castillo del siglo XIII, los señores de la zona terminarían marchando a vivir a palacios más cómodos (salvo las fortalezas de la conocida Escuela de Valladolid del siglo XV, que eran palacios fortificados, más que verdaderos castillos militares). Por todo esto, fue cayendo en el olvido. El paso de la guerra de la independencia le dio la puntilla. Para evitar un expolio mayor, fue convertido en cementerio.
Iglesia de San Pedro
Construida junto al castillo, es un edifico del siglo XV, con añadidos en el siglo XVIII. La Iglesia es del siglo XV, la torre del XVI, con añadidos en el XVII y la última capilla es del XVIII.
Convento de Nuestra Señora de Campolapuente
Se puede ver desde la carretera, especialmente bien desde la deviación hacia el yacimiento de los cayos. Es solo unas ruinas a las afueras de la población. Se la ve que en un tiempo debió ser impresionante. Pero ahora no son nada más que piedras mal sostenidas.
Casas Señoriales
En el Cornago hay varias casas solariegas, aunque destaca uno, el Palacio de los Baroja, construido en el siglo XV en mampostería y ladrillo. Recientemente ha sido subastado por Hacienda.
Ermitas de la villa
Que una villa tan pequeña posee tantas ermitas, fue un hecho que nos llamó la atención; y más, que están algunas en el propio casco urbano, y aparentan ser una casa más. Por fuera, no parecen ser lo que son, y podrías pasar sin verlas si no te lo advierten. Así nosotros vimos la ermita de Santa Catalina y la ermita de la Piedad. Pasamos al lado, pero estaba cerrada la ermita de San Blas, que por las fotos es una maravilla. Nos han contado que fue una antigua sinagoga, por lo que debió haber un barrio judío.
Visitas guiadas a la población
Se organizan visitas guiadas al Castillo, la Nevera, el Centro de Interpretación Castillo de la Luna y la Exposición de Fósiles y Minerales. Estas se realizan:
- En invierno, los miércoles y viernes a las 16:00h.
- En verano, los miércoles y viernes a las 17:00h
Fines de semana y festivos, contactar por teléfono al +34 678 839 294, de 16:00 a 19:00 horas
Otros atractivos
Pero además de un pueblo pintoresco, en Cornago es posible disfrutar del avistamiento de buitres leonados, aunque nosotros no llegamos a ver ninguno.
Y por supuesto, y lo que nos trajo pasar por aquí. La presencia de hasta 5 yacimientos de icnitas, entre el que destaca el de los Cayos, con tres zonas diferentes con un gran número de pisadas de muchos dinosaurios; Incluso, como se distingue claramente, la huella de las mareas en el fondo arenoso.
La Taberna de la Reyes
Aunque nos consta que nuestros amigos de A Tavola con il Conte van a hablar de este lugar, queremos desde aquí, en nuestra visión más gastronómica (gastroturismo) recomendaros en vuestra este lugar. Os ponemos en contexto; las 3:00 – 3:30 de la tarde, en un pueblo donde no parece haber casi nadie. Por fin nos recomiendan este lugar. Y por fin aparece. ¿Qué puedes decir? –”Dame de comer de lo que tengas”-. Respuesta:
-“En esta casa se come de lo que quieras, que para eso tenemos la cocina abierta y un menú de temporada”-
Y así es. Luego, con más calma, vemos que tienen wifi, que poseen un montón de referencias en internet,.. Vamos un local 2.0 en un lugar medieval. Pero lo mejor fue el menú del día. Excelente. Os diremos que hace tiempo que no comíamos una menestra casera tan buena. Y el plato de judías blancas, en su punto. Además son una versión local con la judía menos seca, para que tenga más fibra. Y luego las carnes, posiblemente sean las carrilleras al vino tinto más tiernas que hemos comido nunca. O el secreto ibérico, en auténtica parrilla. Todo fresco, casero,..
Además, al ir acompañados de niños, el gerente nos invitó a unas raciones de croquetas variadas sin preguntar, según entramos.
Y los postres también caseros. No hemos tomado mejores tartas de queso o panna cotta.
En el menú se incluía el vino, un tinto joven de maceración carbónica, muy afrutado, muy diferente a los clásicos DOCa. Rioja, que son pesados,.. muy fresco y divertido. El tempranillo – maceración carbónica de Bodega Gómez de Segura. ¿Y cuánto pagamos? Pues 15,50 €/persona. ¡A ver quién lo mejora!
Igea
Después de comer y terminar de visitar el pueblo de Cornago, fuimos a Igea, un pueblo próximo donde se encuentra el aula de interpretación paleontológica. Este pueblo es menos pintoresco que el anterior, aunque tiene sus punto darte un paseo. Especialmente llamativa la Casa Palacio del Marqués de Casa Torre.
Casa Palacio del Marqués de Casa Torre
Nos comentan que es uno de los edificios civiles más interesantes y llamativos de La Rioja; y desde luego curioso es. Es una casa Torre del siglo XVIII en estilo italiano florentino. Pertenecieron a un corregidor en el Virreinato de Perú. Durante aquella época, amasó una gran fortuna. A su regreso, mandó construir este palacio en su pueblo natal de Igea. Como inicialmente no fue de su agrado. Se reconstruyo el proyecto hasta llegar a la actual construcción.
Evidentemente esta casa tan especial, tiene sus leyendas, como la de las riquezas del Marqués, o el tesoro escondido. Bueno, son leyendas, lo cierto es que aunque el entorno lo vimos en obras, cuando terminen (esperamos que en breve) sea mucho más bonito todavía.
El Centro de Interpretación paleontológico de Igea
Como llevamos contándote, esta zona es privilegiada en cuanto a yacimientos de icnitas. Algo casi único a nivel internacional. Así que era imposible que no se contara con un museo donde dar a conocer este patrimonio. Pero esto es La Rioja. En otras latitudes el museo sería espectacular y súper promocionado, porque ¿Qué otra cosa atrae casi por igual pasión a grandes y pequeños? Los dinosaurios.
Este centro de interpretación está en un edificio del Ayuntamiento y resulta poco visible. No obstante posee una muestra de esta riqueza arqueológica única, como restos óseos de un Baryonyx y un Hypsilophodon, dinosaurios únicos en el mundo y localizados sus restos en La Rioja. No obstante, este Centro posee un material muy completo e interesante para todas las edades, adaptado a niños y a expertos en paleontología.
Información de interés
Horario del Centro
- En verano, del 1 de junio al 15 de septiembre; de martes a sábado de 11 a 14 horas y de 17 a 20 horas.
- En invierno, del 16 de septiembre al 31 de mayo; de martes a sábado de 11 a 14 horas y de 15:30 a 18:30 horas.
- Los domingos y festivos, de 11 a 14 horas.
Precios de las entradas
- Adultos: 3,00 €/persona.
Jubilados: 2,00 €/persona.
Grupos de más de 10 personas: 2,00 €/persona.
Niños menores de 12 años: 1,50 €/niño.
Situación
- Calle Mayor, 10 (Edificio del Ayuntamiento).
26525 – Igea (La Rioja).
Yacimientos y maquetas de dinosaurios
La primera maqueta a escala que vimos fue antes de llegar a Igea; está señalando un yacimiento donde está el tronco de un árbol fósil. Un tronco de un árbol de prehistórico. Es visitable por libre, aunque el fósil del árbol está protegido en una caseta con verjas para permitir la verlo. Además, este yacimiento, ligeramente en altura, es un punto Star light para ver las estrellas.
Y se remata con una maqueta de Diplodocus a “tamaño natural”. Este dinosaurio está comiendo de un “árbol” que simula al del yacimiento.
En la zona, también hay otros yacimientos de icnitas y maquetas. Como en el propio pueblo de Igea. Un Pachycephalosaurus, más conocido como Cabeza Casco.
Enciso y su barranco perdido
Nuestro viaje terminará en Enciso. Prácticamente en la frontera con las tierras Altas de Soria. De hecho la continuación de la carretera nos lleva a la Ruta de las Icnitas descrita por nuestros amigos de Destino Castilla y León. En esta ruta, vamos a ver varios yacimientos más icnitas.
Yacimiento de Valdecevillo
Pero antes de llegar a Enciso, una zona mucho más verde que la que hemos pasado, que era bastante árida, pasamos por un parking que lleva a una ruta de senderismo donde encontramos maquetas de dinosaurios a tamaño real. Esta zona es el yacimiento de Valdecevillo.
Destacan las maquetas del Braquiosaurio, el Allosaurus, la familia de Iguanodones y un Hadrosaurio, que son los que han dejado esas huellas ahí.
Por esta ruta llegaríamos además de a unas bonitas vistas, a la zona de icnitas y a un parque de aventuras, con una tirolina. No llegamos a recorrer entero el sendero, pero subimos bastante. La parte que recorrimos estaba bastante bien para hacerla incluso con niños.
Casco urbano de Enciso
Por fin llegamos a Enciso. El pueblo es más grande que los dos anteriores. Está también adosado a una ladera. En la cima, hay unas ruinas de un castillo, que junto al de Cornago eran la línea defensiva Castilla en La Rioja. En Enciso vimos, de lejos una gran iglesia; la Iglesia de Santa María de la Estrella, coronando el pueblo. Aparentemente muy interesante. Y otra más chica, iglesia San Pedro.
Nos gustó dar un paseo rápido con el coche. Destacando la plaza consistorial, donde se encuentra el Ayuntamiento.
Centro de aventuras El Barranco Perdido
A este centro no le podemos dedicar mucho, porque llegamos y estaban cerrando. La época en la que fuimos además no está más que en mínimos. Es mejor regresar en verano, como esperamos hacer. En este parque, se juntan deportes de aventuras con paleontología, lo que hace que pueda ser diversión en familia.
Se empieza con el Museo cretácico, un lugar donde aprender a ser paleontólogo durante un día. Esta parte nos ha gustado mucho, básicamente lo que pudimos ver, porque entre la falta de tiempo para cerrar y niños tirando, la verdad es que no nos dio para mucho más. Tras esto, vimos parcialmente el “Laboratorio del tiempo”, un lugar donde hacer actividades didácticas en el interior. Sabemos que en el exterior hay tres yacimientos reproducidos para que los más pequeños usen lo aprendido.
El centro luego posee zonas de piscinas, tirolinas, rocódromo,.. y más cosas, pero no era el tiempo de disfrutar de esto.
Información de interés
- Situación
El Barranco Perdido
Ctra. Navalsaz s/n
Enciso, La Rioja
Telf.: +34 941 396 080
@.: administracion@barrancoperdido.com
Y ya llegamos al final de nuestra ruta. Sin duda incompleta. Sabemos que vamos a regresar, con más tiempo. Seguro que es una gran escapada familiar que no nos podemos perder.
Y vosotros, ¿Ya conocías este lugar? ¿Cuántas más cosas interesantes nos hemos perdido? Cuéntanos a todos tus experiencias dejándonos un comentario.