Cuando se ve una fotografía de un campo de flores de color, una de las reacciones más típicas es pensar en Holanda, aunque no sean los típicos tulipanes. Pero como hemos descubierto recientemente, Castilla la Mancha posee unos campos de lavanda igualmente preciosos y son la excusa perfecta para visitar Brihuega y Torija, dos pueblos de la Comarca de la Alcarria guadalupense.
Información general¿Cómo llegar a Brihuega?
¿Cómo llegar a Brihuega?
A este precioso pueblo de Brihuega, en Guadalajara, se llega saliendo desde la Autovía A2, Madrid-Barcelona, en la salida 73, a la altura de Torija. Se toma la carretera CM2011 y a pocos kilómetros se alcanza esta localidad; aunque los campos de lavanda se encuentran fuera del mismo.
Salida de la autopista a Brihuega a la altura de Torija – Destino y Sabor
¿Dónde alojarte?
No os podemos recomendar ningún hotel o casa rural en Brihuega, pues cuando hicimos noche en esta zona, lo hicimos en la propia Guadalajara, en el Hotel El Sueño del Infante; o bien cuando realizamos un fin de semana recorriendo Viaje a la Alcarria, en su LX Aniversario, en Cifuentes, y en aquella ocasión nos quedamos en el Apartahotel Los Tobares, que aunque no están en el propio pueblo, está al lado.
Ambas localidades están cerca de Brihuega y sus campos. Pero si tuviéramos que elegir uno, nos parece interesante en el Hotel Hospedería Princesa Elima.
¿Dónde comer?
En esta ocasión, tampoco comimos en Brihuega, pues en este viaje nos acompañaban los amigos de Rutas por España y realizamos un picnic en un merendero con sombra, agua y para usar en otro momento, una barbacoa.
Merendero a las puertas de Brihuega – Destino y Sabor
Pero si tuviéramos que recomendarte algún sitio, te contamos que nos tomamos un café en una tasca local, el Asador El Tolmo, en la Avda. Constitución, 26, aunque es más en plan picoteo y raciones.
Los campos de Lavanda
Aunque se habla de lavanda, esta planta, tal y como aprendimos en la visita en Huete de la empresa Lavandaña, es un híbrido llamado lavandín, aunque para todos los efectos es “lavanda”, y así lo vamos a llamar.
Campos de lavanda en Brihuega – Destino y Sabor
Los campos de lavanda no se encuentran en el propio pueblo, como es lógico, están esparcidos por lo alto del páramos, ya que Brihuega ocupa la parte baja y media de una depresión causada por un flujo de agua. Aunque por la carretera de Torija a Brihuega encontráis algunos, los más impresionantes se encuentran saliendo por la carretera CM2005, que es la calle Jesús Villa Rojo. Desde ahí, camino de Hontanares, se llega a unos 4 o 5 kilómetros al Monumento de la Batalla de Brihuega.
Visita a los campos
El día de nuestra visita no era un día especial, ni fin de semana ni festivo. Pensamos que no habría gente, pero durante el largo rato que estuvimos disfrutando de los paisajes que hay por esta carretera, vimos un montón de gente, que parando en la zona, paraba para contemplar los campos, como nosotros.
Campos de lavanda en la comarca de La Alcarria – Destino y Sabor
Hay varios campos que están “cerrados” pidiendo que no se entre. Esto es porque en ocasiones, la llegada masiva de personas, ha creado destrozos en unos campos que producen el aceite de lavanda, que es la materia prima para los productos que llevan este aroma.
La mejor época para visitar estos campos es desde finales de junio hasta agosto.
Campos de lavanda en La Alcarria – Destino y Sabor
Importancia de los campos de lavanda
Esta gran cantidad de concentración de flores de lavanda es una cantera perfecta para la recolección de néctar, por lo que está lleno de abejas obreras que recogen este polen, de flor en flor. Tal es la cantidad de abejas que existe un ruido de fondo continuo.
Abejas trabajando entre las flores de lavanda – Destino y Sabor
Esto significa que hay un ecosistema muy importante creado en torno a estas flores, que hay que respetar. Las abejas parecen tan habituadas a los seres humanos que ni aun pasando a su lado parecen distraerse o molestarse. Aunque, ojo, tratadlas con cariño y respeto.
Estos campos de lavanda son además parte del origen de la famosa miel alcarriense, una comarca que se extiende tanto por Guadalajara como por Cuenca.
Monumento a la batalla de Brihuega
En medio del campo, hay una parcela junto a la carretera con un monolito. Este monolito es un monumento conmemorativo a la Batalla de Brihuega, que enfrentó a las tropas borbónicas contra las austracistas en el contexto de la guerra de sucesión a inicios del siglo XVIII.
Monumento a la batalla de Brihuega
Visita a Brihuega
Aunque es un paisaje casi mágico, al cabo de un rato, termina cansando, por lo que decidimos regresar y conocer un poco más a fondo este pueblo alcarriense.
Qué ver en Brihuega
Este pueblo ya lo habíamos visitado hace años, recorriendo la Ruta de Viaje a la Alcarria, lo que ocurre con esa ruta que se hace en un fin de semana, es que es difícil medir los tiempos de estancia en cada pueblo.
Tejo centenario en la plaza de Herradores – Destino y Sabor
Brevísima historia de Brihuega
Esta población nace como un castro prerrománico, que con los años se adapta a ser parte de esta civilización. Su entorno con numerosas fuentes de agua, buena caza y buen lugar para cultivar, hace que nunca deje de ser habitado y que hasta los reyes musulmanes de Toledo tengan un pabellón de caza en la población.
Durante la Guerra de Sucesión, las tropas francohispánicas derrotaron a las tropas inglesas, que apoyaba al candidato Austracista en dos batallas en la zona, la batalla de Brihuega y la batalla de Villaviciosa.
Felipe V victorioso en la batalla de Brihuega
Esta población también fue escenario de guerra durante 1937, donde los italianos sufrieron una derrota en la zona asociada a la batalla del Jarama, que pretendía conquistar para los nacionales Guadalajara y así rodear Madrid. Desde 1973 se le concede la declaración como Bien de Interés Cultural como Conjunto Histórico.
Principales atractivos
Esta población durante la edad media estuvo amurallada, y de hecho, se conservan partes del lienzo de la muralla a la vista, otras partes, así como los cubos, están integrados en las viviendas. Su interior es un típico trazado medieval.
Calles del recinto amurallado de Brihuega – Destino y Sabor
Uno de los lugares que más nos gustó de Brihuega es la plaza de Herradores, donde un tejo de casi 100 años comparte su sombra con la gente que quiere acercarse a él y sentarse en la maceta que lo acoge.
Las calles están muy cuidadas, y si visitáis esta población sobre la primera semana de julio, es muy posible que disfrutéis de las fiestas de la Lavanda. El pueblo se tiñe de colores azulados y violáceos, se ponen toldos, se decoran las fachadas y los escaparates de los locales,.. Es bastante chulo.
Real Fábrica de Paños de Carlos III
Brihuega fue una población que apoyo a Felipe V de Anjou, por lo que este, premió a esta villa instalando una Real Fábrica. Este impresionante edificio del siglo XVIII se conserva en relativo buen estado, aunque la actual configuración es de Carlos III.
Entrada a la Real Fábrica de Paños de Carlos III en Brihuega – Destino y Sabor
Recuerda bastante a la Real Fábrica de Vidrio de La Granja de San Ildefonso, pues están construidas siguiendo el mismo concepto racional del siglo de las luces.
Jardines de la Real Fábrica
Creemos que este Real Fábrica es visitable, pero está ahora en obras de rehabilitación total. Eso significa que solo se puede llegar hasta el primer patio de la entrada.
Jardines de la Real Fábrica de Paño de Brihuega – Imagen de España Fascinante
De otra estancia, sabemos que existen unos jardines de corte romántico anexos a esta fábrica, pero no los pudimos visitar, porque como ocurre siempre, solo están abiertos por la mañana y en fin de semana. Nuestro recuerdo es que son “pequeños”, pero muy atractivos. Desconocemos si les están afectando las obras.
Castillo de Brihuega
Este castillo es de época de la reconquista, mandado construir por el arzobispo de Toledo en el siglo XI. No obstante, se cree que bien pudo existir una fortificación inicial de época árabe o anterior.
Castillo de Brihuega – Destino y Sabor
Actualmente está protegido como parte del Conjunto Histórico y su interior se usa a modo de cementerio.
Iglesias y conventos de Brihuega
Hasta donde sabemos, Brihuega tiene 3 iglesias en pie, la Iglesia de San Felipe, de San Miguel y de Santa María; así como una cuarta en ruinas, de la que solo se conservan los cimientos y el ábside de la capilla central, Iglesia de San Simón, que debió ser una mezquita o una sinagoga.
La que más nos atrajo es la Iglesia de San Felipe. Posee tres naves y es de planta basilical. La estructura está sujeta por unos arcos longitudinales que sostienen el techo de madera. Se nota que ha sido restaurada en tiempos recientes, pues está perfectamente conservada.
Iglesia de San Felipe de Brihuega – Destino y Sabor
Otra iglesia con bastante encanto es Santa María de la Peña.
Museo de Miniaturas del Profesor Max
Este museo lo hemos visto anunciado en numerosas ocasiones durante nuestras visitas a la Alcarria. No lo hemos llegado a visitar, pero os podemos contar en qué consiste este museo, creado por la colección de miniaturas, que el briocense “Profesor Max”, mago, mentalista y aficionado a coleccionar miniaturas, fue adquiriendo a lo largo de su vida. Su hermana, al fallecer este, transformó la casa en un museo y siguió ampliando la colección.
Museo de miniaturas del Profesor Max – Composición de Destino y Sabor
El precio de la entrada es de 7€, pero según nos han comentado es una maravilla de un mundo de miniaturas que entran en la punta de un alfiler.
Lavadero tradicional
Cerca de la plaza de Herreros, se encuentra este lavadero tradicional, restaurado hace pocos años. Es un lavadero del siglo XV, con 3 pilones distintos. Hacia el exterior, está la Fuente de los 12 caños, una fuente renacentista de singular belleza.
Fuente de los 12 caños, detrás está el lavadero – Destino y Sabor
Pasear por Brihuega es una maravilla, pues aunque posee un toque dinámico, con cosas actuales, pero con una paz que permite relajarse un poco al viajero.
Visitar Torija
Aprovechando el viaje, también conocimos con calma la población de Torija. Como Brihuega ya habíamos pasado por ella, pero rápido y sin conocerla a fondo.
Breve reseña histórica
Esta población siempre ha estado habitada, pues un paso natural entre el valle del Ebro y La Mancha. Es por eso que tras la reconquista, la familia Mendoza, muy ligada a Guadalajara en general y La Alcarria en particular construyera una fortificación, aunque el actual castillo es una mejora y ampliación a modo de residencia del siglo XV.
Castillo de Torija – Destino y Sabor
Por aquí pasaron en alguna ocasión Carlos I y Felipe II, pero realmente nunca llego a ser una residencia importante para esta familia.
En el siglo XIX, el “Empecinado” se hizo con el castillo y lo usó como base de operaciones, pero cuando tuvo que huir de los franceses, voló sus muros para que no pudiera ser usado por ellos como fortín.
Los principales atractivos de Torija
Castillo de Torija
Tal y como hemos dicho, lo principal de esta población es el Castillo, de la escuela de Valladolid, del siglo XV.
Castillo de Torija y Museo del Viaje a la Alcarria – Destino y Sabor
Actualmente en su interior se encuentra el Museo de la Ruta de la Alcarria, ya que en muchas ocasiones se empieza la ruta en sí desde Torija.
A los pies de esta construcción se encuentra la plaza del Castillo, un amplio espacio abierto con casas porticadas, que aunque algunas modernas, creemos que sustituyeron a otras de similar configuración y eran el lugar perfecto para la celebración de mercados.
Plaza del Castillo de Torija – Destino y Sabor
Iglesia de Santa María de la Asunción
Esta iglesia fue edificada en el siglo XVI, en un estilo tardogótico que no concuerda con los estilos renacentistas y platerescos que ya imperaban en aquel momento. Los detalles finales son neoclásicos, de las reformas del siglo XVIII. En el siglo XX fue necesaria su reconstrucción tras la Guerra Civil donde es destruida por el bando republicano.
Iglesia de Santa María de la Asunción de Torija – Destino y Sabor
En su interior encontraréis una iglesia con tres naves de planta basilical, la central destacando en altura. Destaca actualmente por su parca decoración interior, con líneas clásicas y un precioso retablo renacentista.
Interior de la Iglesia de Santa María de la Asunción de Torija – Imagen del Ayto. de Torija
Realmente el exterior, con una piedra que gris granítica y una torre de cuatro cuerpos y planta cuadrada, esconde su interior, simple y tranquilo que llama al sosiego. A los pies, una zona ajardinada con algunos columpios, forman, junto al acceso, lo que llaman la plaza de la Iglesia.
Restos de la muralla
Torija fue un recinto amurallado, su plano así lo sugiere, con su “paseo de ronda” o adarve. En la actualidad no queda prácticamente nada, tan solo una pequeña zona, donde una torre se integra en la configuración urbana actual; y otra torre, cuya cimentación forma parte de una construcción moderna.
La Picota
En la parte norte, donde encontramos más “vidilla” para tomar algo, vimos una picota del siglo XV que nos habla de la importancia de la población, donde en época de esplendor, la familia Mendoza impartía justicia.
Rollo de justicia de Torija – Destino y Sabor
Y ya veis cómo podéis encontrar una escapada rápida para los días de verano, disfrutando de un entorno encantador con los preciosos campos de lavanda y dos poblaciones de singular belleza, que gracias al Viaje a la Alcarria del maestro y premio Nobel, Camilo José Cela, nos recordó que estaban ahí.
¿Y vosotros? ¿Habéis estado alguna vez en esta zona? ¿Os gustan los campos de lavanda? ¿Sabéis la de cosas que se pueden hacer con este producto que se produce en La Alcarria? contadnos cómo fue vuestra experiencia o que otras cosas nos dejamos por visitar en la zona.